El hada de los tiempos, existió en la tierra una vez; y su nombre fue Ada de los Useglios.
Fue hada por ser mágica, fue Ada por ser perra.
De los Useglios el apellido, de los tiempos su característica.
La muestra mas grande de vida, la muerte mas grande en mi memoria.
Yo le di su nombre, yo le di su última caricia.
Esa mañana la encontre tirada, con sus ojos aún abiertos, una gota de sangre de la boca se le caía, y su cabello, todavía se movía. Yo pensaba que aún, estaba viva.
La noche anterior supe que se moriria mi Ada, mi hermosa Hada de la infancia.
Tanto la amaba, que un día la acaricie de mañana a madrugada, ella mi miraba, creo que también me amaba.
Y así fue que me dejó, en este mundo de Adas, para irse a uno de Hadas. Y yo tambien dejé aquellos dias en los que soñaba con alas, aunque a veces, recuerdo a mi bretona... y me surgen mil lágrimas...
Para la nafta de mis esperanzas, y el ventilador de mis palabras; la bretona que fue el principio de esta hermosa danza. La de imaginar.
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